El ayuntamiento de Novelda ha aprobado una nueva ordenanza de Venta no Sedentaria, los populares mercadillos que se realizan de manera estable u ocasional. Las principales novedades con relación a la anterior, que únicamente regulaba el mercadillo de los miércoles y los sábados que se celebra en las calles adyacentes al Mercado de Abastos, es la posibilidad de que este tipo de iniciativas se puedan desarrollar en suelo y por iniciativa privada, así como la reserva de una serie de puestos de venta para emprendedores y organizaciones con fines benéficos.
Hasta ahora la venta no sedentaria era competencia exclusiva del propio Ayuntamiento, pero una directiva europea desarrollada con posterioridad por el Estado y la comunidad autónoma, propicia una serie de cambios.
La edil de Mercados, Hortensia Pérez, ha indicado que “se trataba de regular y adaptar la normativa municipal a la legislación y a la realidad existente, ya que con frecuencia de organizan mercadillos ocasionales de fin de semana, las ferias que se celebran en las fiestas de los barrios o mercadillos semanales en suelo privado”.
La nueva ordenanza regula, incluso, la venta de enseres propios de los vecinos en este tipo de mercadillos, otra de las novedades importantes. “Cualquier vecino podrá desprenderse de bienes propios, siempre y cuando no se trate de una actividad lucrativa de compra-venta de mercancía, y se reservará una serie de puestos en los mercadillos ya sean de iniciativa pública o privada para ello”, en palabras de la edil.
Esta innovación es importante ya que hasta ahora tenían que acreditar una serie de requisitos, como pagar el recibo en el régimen de autónomos o el IRPF en el epígrafe de actividad comercial, que ahora no serán necesarios. “Esto hay que remarcar que es para bienes propios, nunca para enmascarar una actividad lucrativa que pueda hacer competencia desleal a quienes se dedican a la actividad comercial”, ha matizado la concejala.
La edil ha subrayado que la ordenanza no sólo pretende adecuarse a la normativa europea sino que “hay que verlo desde la óptica de que los ciudadanos disponen de una herramienta para canalizar iniciativas en el campo del comercio lo que, esperemos, redunde en una mayor actividad y en que afloren nuevas actividades emprendedoras y de autoempleo”.